jueves, 9 de octubre de 2014

Lunática



  Levantarse con el pie izquierdo, ¡cuántas veces habremos oído esta expresión! Hasta los que no somos supersticiosos a veces nos lo planteamos. Hoy no me pongo esta pulsera, recuerdo que la última vez que la llevé fue cuando todo me salió al revés.
Creo en la concatenación de los elementos o mejor dicho, en el efecto mariposa. Basta con que alguien sufra dolor de cabeza para que cuando encuentre al compañero de  trabajo en el pasillo de la oficina le regalé un "bufido”. El recibidor del cariñoso saludo, a su vez se siente molesto y se plantea en qué momento se interpuso en su camino. A continuación, baja los tres peldaños de siempre, los de toda la vida y que han estado en el mismo lugar, da un traspié y se tuerce el tobillo.
Repasamos mentalmente todo lo que hemos hecho desde que pusimos el susodicho en el suelo al bajarnos de la cama , y buscamos el mínimo indicio que dé respuesta a todos los inconvenientes del día. Eso nos reconforta, al menos no he sido el culpable directo de todas las desgracias del día.
  Es cierto que formamos parte de la naturaleza y que queramos o no, somos seres vivos que sufrimos su influencia. El sol, la luna, las mareas determinan nuestros estados físicos y mentales.

   Confieso ser una lunática.

2 comentarios:

  1. Tampoco soy supersticioso, pero la cosa me ha llevado años. Culturalmente, hemos sido educados más o menos en ese ambiente y arrancarse los vestidos que nos impone la cultura lleva tiempo y esmero.
    Más allá de esto, está claro que la explicación de muchas cosas se encuentra ahí, en la naturaleza, lo difícil encontrar la respuesta o saber interpretarla.
    Gran entrada

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    1. Estoy de acuerdo contigo en que lo difícil es saber interpretar todo lo que nos rodea. En ello radica, desde mi punto de vista, la sabiduría.

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